Vuelven a este rinconcito de silencio los Portishead, pero es que publicaría cada una de sus canciones… Además ésta es una que me marca. Habla de caminos que seguimos y que dejamos, caminos emocionales. Al igual que Glory Box, esta perla apareció en su disco debut Dummy, en 1994.
Es una banda que ha puesto ya su huella en el trip-hop, volviéndose en un imprescindible del género. Y qué decir de la voz de Beth Gibbons…
La versión de este videoclip es de un directo que hicieron en Nueva York junto a la Orquesta Filarmónica de NY. El acompañamiento de violines pone aún más la piel de gallina.
Letra:
Oh, can’t anybody see,
We’ve got a war to fight,
We never found our way,
Regardless of what they say.[estribillo]
How can it feel, this wrong,
From this moment,
How can it feel, this wrong.Storm,
In the morning light,
I feel,
No more can I say,
Frozen to myself.I got nobody on my side,
And surely that ain’t right,
Surely that ain’t right.Oh, can’t anybody see,
We’ve got a war to fight,
Never found our way,
Regardless of what they say.[estribillo]
Oh, can’t anybody see,
We’ve got a war to fight,
Never found our way,
Regardless of what they say.[estribillo]
Otro día más (y ya van ni se sabe este mes…) en el que me he tenido que repetir mucho aquello de «1, 2 y 3. Yo me calmaré. Todos lo veréis» a la par que respiraba hondo. Así que ahora, en casa, destensando, esta canción me viene que ni pintada. Música electrónica francesa de la mano de un trío de ases: Fabrice Dumont, Stephan Haeri y Christophe Hetier. En su álbum debut, Genetic World (2001), alcanzaron el éxito con esta melodía. La voz la pone Angela McCluskey.
Un 8 de marzo más y seguimos teniendo que celebrarlo. Una pena, porque eso significa que continuamos haciendo distinción entre hombres y mujeres (cuando todos somos personas, cada una con sus características). Como el 
Si de canciones elegantes se trata, creo que ésta se lleva la palma. La voz de Geike Arnaert tiene un carácter y estilo raros de encontrar. The Magnificent Tree, publicado en el año 2000, fue el espaldarazo de esta banda belga que había sufrido múltiples cambios de vocalistas, hasta dar, en mi opinión, con la que mejor se adaptaba.